El presidente de Fox, Kevin Reilly, ya anticipó hace un año, tras las duras negociaciones en primavera, que era “muy probable” que acabara en 2012. Según exponen en el comunicado difundido, que recoge la revista TV Guide, David Shore, el creador y productor ejecutivo de la serie, llevaba meses pidiendo establecer un calendario final para darle el final merecido. A esta petición, también se ha sumado el deseo de Hugh Laurie de dejar la serie. El actor dejó claro el año pasado que quería centrarse en su carrera musical y dejaría la televisión como intérprete cuando finalizase la serie, aunque seguiría ligado a la pequeña pantalla en tareas de producción o guión.

“En el transcurso de los últimos ocho años, los productores de ‘House’ se han sentido sumamente honrados de ser objeto de tanta atención por un inteligente, exigente, humano y reflexivo público”, subraya el comunicado, que resalta la huella que deja la serie tras su gran calado social. Kevin Reilly, presidente de Fox Entertainment, también expone su respeto a la decisión de los productores y Hugh Laurie, a los que da las gracias por crear algunos de los mejores personajes e historias que se han visto en la televisión.

Pese a los buenos datos de audiencia y críticas, tanto los directivos como el equipo creativo de ‘House’ han decidido que la serie no acabe “autodestruyéndose”, es decir, han optado por terminar en alto sin que se alargue sin motivo la historia. Tras más de 170 episodios, el doctor House y su equipo se despedirán para siempre de la televisión en el mes de mayo.

‘House’ es una de esas series que ha marcado y marcará la historia de la ficción. Ha sido recientemente elegida la serie más popular del mundo con más de 80 millones de espectadores en casi 70 países.